Sube la tensión en Génova: durante los procesos en torno al G8, la policia italiana requisa los ordenadores portátiles de dos activistas. Comunicado de Supportolegale.

El 16 de marzo del 2005 la magistratura genovesa adopta una nueva táctica, la "requisa con destreza”.

Durante una pausa en el proceso judicial contra dos activistas milaneses por hechos no relacionados con el G8-2001, unos funcionarios de la DIGOS (cuerpo de policía para acciones especiales especialmente de orden público y que trabaja siempre de civil) ejecutaron la orden de requisa de dos ordenadores portátiles que se encontraban en la sala. Se trataba de un delito de difamación basado en la denuncia presentada por los fiscales Anna Canepa y Andrea Canciani, por injurias contra ellos en el sitio web: italy.indymedia.org.

Los ordenadores requisados pertenecen a dos asesores del Genoa Legal Forum y contienen informaciones privadas de la defensa en el proceso contra 25 manifestantes por el G8-2001, proceso que por casualidad, tiene como fiscales a Anna Canepa y Andrea Canciani.

Esta requisa es el enésimo acto de provocación destinado a crear un clima de tensión en torno a los procesos genoveses, este hostigamiento es acompañado sistemáticamente por artículos en la prensa nacional y de Génova (Secolo XIX) así como de programas en la televisión “pública” que como en el caso del programa Punto e a Capo (Rai 2) presentó en horas de máxima audiencia una ruda reinterpretación del G8 en Génova con imágenes e interjecciones telefónicas montadas.

Este nuevo intento de intimidación mediante la requisa de los ordenadores refleja la atención que ciertos sectores relacionados con los procesos genoveses dirigen hacia el trabajo de una red de activistas que preparan las audiencias y escriben síntesis semanales y notas de prensa sobre los procesos G8-2001.
En comparación con esta atención existe un silencio incómodo de partes del movimiento y de aquellos que supieron construirse una carrera política institucional/no-institucional a partir de Génova.

Sorprende también que la atención de los fiscales – encargados de establecer la verdad – se dirija hacia algunas frases consideradas injuriosas publicadas por internet, y en cambio muestren total desinterés con respecto a hechos bastante más graves que han surgido durante los procesos legales: la utilización de barras de metal en vez de porras reglamentarias por los carabineros del 3. Batallón Lombardia, la requisa ilegitima de todo el archivo de indymedia.org que originalmente pertenecía a un abogado y que ha pasado, incompleto, a manos de la fiscalía – claramente una falsificación de las pruebas – hasta la reticencia de algunos funcionarios y dirigentes de policía y carabineros durante las audiencias.

Muchos episodios que ocurren cotidianamente en la sala del tribunal de Génova confirman este clima de tensión: se “blinda” el tribunal de Génova con agentes de policía vestidos de antidisturbio, funcionarios de la DIGOS están presentes masivamente dentro y fuera de la sala de juicio, hay controles y requisas durante las audiencias (que son públicas), provocaciones repetidas y hasta agresiones físicas como la torta que dio la semana pasada un agente de escolta de la fiscal Canepa a un chico presente en la audiencia porque no se había quitado la capucha.

El último desagradable episodio ha tenido lugar en la audiencia preliminar del 19 de marzo pasado contra los presuntos torturadores de Bolzaneto (47 policías, policía penitenciaria y personal sanitario): el juez ha tenido que alejar de la sala a un funcionario de la DIGOS porque la audiencia no era pública y él no tenía derecho a estar en la sala.

En la audiencia de hoy, 22 de marzo 2005, en el proceso contra los 25 manifestantes durante el G8, el tribunal ha reconocido que la requisa de los dos ordenadores portátiles ha dañado la defensa y por lo tanto ha concedido una suspensión del juicio hasta el 5 de abril.

En la sala, la fiscalía genovesa ha admitido implícitamente que la requisa, aunque técnicamente se refería a otro procedimiento legal, iba dirigida a dos asesores del Genoa Legal Forum, uno de los cuales, en particular ha sido señalado por la fiscal Canepa que no consigue evitar comentarios nerviosos sobre el hecho que durante la audiencia continúen a teclear los ordenadores.

El presidente del tribunal no ha admitido las motivaciones de los fiscales, dando razón a la defensa que subraya que la requisa pone en riesgo la igualdad de condiciones entre defensa y acusación prevista por la ley.

Los ordenadores han sido enviados a Turín (ciudad del norte de Italia) y no sabemos aún cuando serán restituidos.

A pesar de este clima de tensión y de intimidación Supportolegale continuará su proyecto de apoyo a las personas que trabajan sobre los procesos del G8 en Génova.

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