Génova, 10 de mayo 2005
Audiencia 48 en el proceso a 25 manifestantes acusados de devastación y saqueo durante el G8.
Quién esté libre de pecado…
El primer testigo de la acusación es Filipo Cavataio, el carabinero del XII batallón Sicilia, que se encontraba en la plaza Alimonda conduciendo el defender que transportaba a Dario Raffone y a Mario Placanica. En realidad Cavataio técnicamente no es un testigo, sino un imputado – de un caso archivado- por haber atropellado con el defender el cuerpo de Carlo Giuliani. Por eso no testimonia bajo juramento y podrÃa hacer uso de su derecho a no responder. Cavataio, reconfortado por la presencia de su abogado, elige responder a las preguntas aunque su testimonio deja muchos puntos oscuros y muchas dudas.
A menos de un metro de distancia de él, en el mismo defender que el conducÃa, resuenan dos disparos de pistola, él presuntamente no los oye, no se da ni cuenta - la defensa en este punto se exaspera-. Asà como tampoco se da cuenta de que esta atropellando el cuerpo de Carlo Giuliani, lo confunde con la basura salida del contenedor que se encuentra en frente del defender.
El testimonio del carabinero es un continuo “no me acuerdoâ€: el militar se considera tan presa del pánico que dice no saber como transcurrió la hora y veinte que separan el homicidio de Giuliani en la plaza Alimonda del ingreso en el hospital Galliera.
Durante el examen de la fiscalÃa, Cavataio “olvida†la presencia de un segundo land rover con el cual cerraban la fila del contingente, aunque habÃan estado utilizando esta configuración desde hacÃa horas en los servicios de orden público.
El viernes 20 de Julio del 2001 significó para él 15 dÃas de asueto con un pronóstico por “stress†(que se convirtieron en 30) y poquÃsimos recuerdos, fragmentarios e incongruentes.
Pero la defensa consigue estimular respuestas interesantes que comienzan a aclarar dónde transcurrieron la hora y veinte minutos “antes del hospital fuimos socorridos y medicados en el comando provincial…â€.
El verdadero protagonista de la audiencia de hoy es en cambio el doctor Adriano Lauro, el máximo dirigente de la PS (policÃa nacional) que dirigÃa el grupo de carabineros involucrados en los hechos de la plaza Alimonda. El brillante dirigente de la PS viene llamado a declarar otra vez por la defensa para reconocer la piedra ensangrentada encontrada junto al cuerpo de Carlo Giuliani.
En las pruebas instrumentales mostradas por la defensa se ve que la piedra no estaba al lado del cuerpo de Carlo hasta que el Reparto Móvil de Milán junto con el grupo del batallón Sicilia tomó la plaza Además de esta piedra, cuando ya ha llegado el personal sanitario también aparece una herida de contusión en forma de estrella en la frente de Carlo Giuliani.
En la precedente audiencia Lauro habÃa garantizado la “diafanidad†de la situación, aunque hasta el magistrado lo halló explÃcitamente una incongruencia. Lauro reconoce la piedra, reconoce que en el pasamontañas (presentado en privado) tan sólo está el orificio del proyectil y no hay daños en el tejido de la parte frontal.
Al dirigente, que en la plaza Alimonda señaló a un manifestante como asesino de Carlo gritando “has sido tú, con tu piedraâ€, imágenes que fueron transmitidas la misma noche en los telediarios, le sobreviene la defensa y le desarma con una filmación en la que se ve claramente al testigo que recoge una piedra del suelo y la lanza en dirección a los manifestantes.
Próxima audiencia el martes 17 de mayo.
Lee la transcripción de la audiencia: https://supportolegale.org/?q=node/244