Génova, 16 de noviembre del 2005

Novena audiencia en el proceso contra 29 personas pertenecientes a las fuerzas del orden por los delitos de lesiones, falso testimonio y calumnia durante la irrupción a los edificios de la escuela Diaz.

Hoy testimonia el periodista Lorenzo Guadagnucci, redactor del periódico "Resto del Carlino", pero presente en Génova durante la jornada del sábado por interés personal. A L.G. le golpean en el gimnasio de la escuela y después ingresa en el hospital en la noche del sábado, 21 de Julio del 2001. Su testimonio es claro, simple y lineal. Llega al edificio a las 22horas, después de haber pasado a las 20horas para dejar sus cosas.

El periodista se duerme. Poco después le despiertan ruidos y gritos, después la policía irrumpe en el gimnasio, donde se encontraba junto con otros. "Vi grupos de agentes entrar corriendo, gritaban, se dirigieron directamente a la gente que tenían enfrente, en la pared larga del gimnasio. Estos primeros policías la emprenden a patadas y porrazos. Escupitajos, recuerdo que escupían, decían cosas como "este es el último G8 que haceís" y "esta noche os vaís a divertir menos". Despues la policía le golpea, primero dos agentes, mas tarde otro cuando ya se encontraba "fuera de combate".

L.G. ingresa después en el hospital con laceraciones y contusiones en el torax y en la espalda. Vigilado por la policía, descubre leyendo el periódico que ha sido arrestado por asociación criminal para saquear y devastar. Los 93 manifestantes arrestados esa noche han sido absueltos de todos los cargos.

Los argumentos de la defensa son débiles, intentan poner nervioso al testigo que responde confirmando todo cuanto ha dicho durante la interrogación de la fiscalía. No ha visto que hubiera personas heridas antes de la razzia, pero le contestan que sólo ha estado en planta baja del colegio y que por lo tanto no puedo excluir que hubiera heridos en los pisos superiores. Obviamente, interrumpe el presidente del tribunal. La actitud de los abogados que defienden los policias pone de relieve su dificultad en un proceso que es irremediablemente claro en lo que se refiere a los hechos, la violencia física (pero no sólo esta) por parte de las fuerzas del orden en aquella noche genovesa. Sus risitas durante el recuento de la violencia hacen pensar que estan a la altura de los acusados que defienden.

Mañana se celebrará la próxima audiencia, a las 9:30 en el aula de alta seguridad del tribunal.