Génova, 22 de noviembre de 2005

En la pausa de la audiencia 65, Franco Zampese, que trabaja en el "Ufficio G8" creado para investigar los hechos de Génova, se encuentra cansado y negligente.

Lejos del ritmo de las primeras audiencias el testigo esta vez tiene que ser incitado por Canciani, frenético por mostrar la amplitud de sus propias investigaciones. El fiscal recurre a todos los trucos del repertorio: mientras muestra la foto mueve el ratón del ordenador sobre el acusado a reconocer, ciñe las cejas, guiña los ojos, da golpecitos en la espalda pero Zampese hoy no está en forma y se nota.

Lo sabe también el fiscal que trás el enésimo error de memoria del valiente Zampese pide y obtiene la suspensión de la audiencia. El examén proseguirá al menos "por tres audiencias" más sostienen los fiscales.

Mientrás tanto en la indiferencia general el juez Devoto, respondiendo a una objección de la defensa, dice algo que no tiene nada de irrelevante: "El testigo no se refiere a datos seguros pero a investigaciones propias".
Si alguno aún se interesara podría ser una idea a desarrollar.

La próxima audiencia tendrá lugar el martes, 29 de noviembre.